Nosotros, como humanos, nos equivocamos y tropezamos con la misma piedra
varias veces. Diariamente, nos podemos equivocar en cosas sencillas como por
ejemplo; ir a la ciudad y equivocarnos de calle con el coche y tener que dar
toda la vuelta otra vez, o también, tenemos una cita, nos confundimos y no
vamos el día que toca. Pero a veces, nos podemos confundir con cosas más
graves, y podemos llegar a hacer mucho
daño a las personas que están a nuestro alrededor. Por eso necesitamos segundas
oportunidades.
Necesitamos que las personas,
humanos, como nosotros, nos den una segunda oportunidad; en el trabajo, en
pareja, la familia… Como ya he dicho antes, somos humanos, no somos máquinas.
Las máquinas están programadas para hacer algo en concreto, pero nosotros no
estamos programados y, a veces, hacemos las cosas sin pensar o razonar y lo
hacemos mal. Las segundas oportunidades las necesitamos para poder rectificar
nuestros errores, o al menos intentarlo. También hay que decir que a veces
hacemos algunas cosas a conciencia y con maldad. Pensamos que si hemos hecho
las cosas con maldad no es justo tener una segunda oportunidad, pero aunque no
nos las merezcamos, las debemos recibir si estamos dispuestos a cambiar.
En conclusión, creo que todos hemos necesitado o necesitaremos segundas
oportunidades en nuestra vida, así que las debemos recibir aunque no hayamos
actuado de manera correcta, pero nosotros también debemos cederlas a las
personas que nos han hecho mal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario